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Todo lo que necesita saber sobre los Derechos de los Padres en las Escuelas Públicas

Los derechos de los padres de dirigir la crianza y educación de sus hijos son derechos fundamentales protegidos por la Constitución de los Estados Unidos.
Alliance Defending Freedom
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Parents’ rights to direct the upbringing and education of their children are fundamental rights protected by the U.S. Constitution.

Mientras leía un artículo recientemente, me tropecé con una foto asombrosa, una que, como señaló el autor, se le perdonaría si usted pensara que es una reliquia del pasado.

Era una foto de un letrero de una escuela primaria pública que promocionaba un evento. Puedes verlo a continuación:

 

 

La foto simboliza los temas candentes y críticos que han ocupado un lugar central en nuestra conversación a nivel nacional: escuelas públicas, raza y familias.

Durante los primeros días de la pandemia de COVID-19, cuando casi todos los estudiantes estaban en casa, los padres se dieron cuenta que muchas escuelas públicas están adoctrinando a los estudiantes con ideologías divisivas. Los estudiantes están siendo sometidos a un trato desigual por motivos de raza, etnia y religión, entre otras cosas.

No solo eso, sino que las escuelas están promoviendo una ideología de género destructiva que les dice a los niños confundidos que pueden adoptar una identidad de género diferente. A los niños se les dice que pueden convertirse en niñas y viceversa. Y estas decisiones y luchas de salud mental las mantienen en secreto de sus padres.

Algunos funcionarios del gobierno parecieran olvidar quiénes se preocuparía profundamente por lo que sucede en las escuelas públicas: los padres.

Aunque la ley reconoce los derechos de los padres, los derechos de los padres claramente, están hoy bajo un ataque cada vez mayor.

Alliance Defending Freedom está defendiendo casos legales que sientan precedentes para proteger los derechos de los padres y hacerlos valer como fundamentales en cada estado.

Pero, usted puede estarse preguntando, ¿qué son los derechos de los padres? ¿Cuál es la historia detrás del problema? ¿Y por qué deberían importarle a todo estadounidense? A continuación, responderemos a estas y otras preguntas apremiantes sobre los derechos de los padres.

 

¿Qué son los derechos de los padres?

Los niños nacen en familias. La familia es el núcleo de la sociedad.

Los derechos de los padres de dirigir la crianza y educación de sus hijos son derechos fundamentales protegidos por la Constitución de los Estados Unidos. De hecho, estos derechos son “pre-políticos”. ¿Qué significa eso? La patria potestad es un derecho natural que existe antes que el Estado. No pueden ser dados o quitados por un gobierno.

Los derechos de los padres incluyen, pero no se limitan a, tomar decisiones sobre la educación y el cuidado de la salud de los niños acorde con los valores de su familia. Los padres deben hacer esto para promover la salud y el bienestar general de sus hijos.

Como dice el refrán, cada derecho conlleva una responsabilidad.

 

¿Por qué son importantes los derechos de los padres?

Los padres tienen la tarea de cuidar de sus hijos antes de que ellos puedan cuidar de sí mismos, enseñándoles a caminar, hablar y amar. Si bien muchas personas ayudarán a formar al niño en la persona en la que se convertirá, ninguna influencia es tan profunda y duradera como la de sus padres. Esta es la responsabilidad de los padres en todas partes.

Como todos los derechos fundamentales, los derechos de los padres deben ser defendidos con atención.

 

¿Cuál es la historia de los derechos de los padres?

De acuerdo con la Corte Suprema de los Estados Unidos, la Cláusula sobre el Debido Proceso de la Enmienda 14 protege los derechos de los padres. La Corte ha afirmado reiteradamente que son derechos fundamentales.

Sin embargo, en el año 2000, el Tribunal emitió una decisión fracturada en un caso de visitas de abuelos, llamado Troxel v. Granville

El Tribunal llegó al resultado correcto al determinar que una madre tenía el derecho de determinar el horario de visitar a su hijo. Pero los jueces no usaron esta oportunidad para definir claramente el estándar legal y proteger la naturaleza fundamental de los derechos de los padres bajo la Constitución.

Por lo tanto, algunos tribunales de primera instancia han utilizado el caso Troxel para confundir la ley y limitar los derechos de los padres. Es por eso que a veces vemos que los derechos de los padres no reciben el mismo trato que otros derechos fundamentales, como los derechos a la libertad de expresión o la libertad religiosa.

Si bien algunos estados han solucionado este problema al aprobar leyes para brindar a los derechos de los padres la protección que merecen, existen lagunas en el panorama legal. Y, de hecho, estas brechas reflejan actitudes conflictivas hacia los derechos de los padres, particularmente en lo que se refiere a la educación.

Algunos creen que el estado y los padres funcionan en conjunto: los padres son responsables de lo que sucede en el hogar, mientras que el estado es responsable de la educación de los niños. Pero eso simplemente no es cierto.

Considere el caso de la Corte Suprema de 1972 Wisconsin v. Yoder. En ese caso, la Corte Suprema ratificó el derecho de los padres Amish de educar a sus hijos en casa después del octavo grado.

En su opinión, el Presidente del Tribunal Supremo, Warren Burger escribió: “La historia y la cultura de la civilización occidental reflejan una fuerte tradición de preocupación de los padres por el cuidado y crianza de sus hijos. Este papel principal de los padres en la crianza de sus hijos ahora está establecido más allá del debate como una tradición estadounidense perdurable”. El Tribunal afirmó lo que muchos saben intuitivamente: la responsabilidad de criar a los hijos recae principalmente sobre los padres.

 

¿Cuál es el estado de los derechos de los padres hoy día?

Mezclar la naturaleza fracturada de la protección de los derechos de los padres con los ataques a los derechos de los padres en la educación y la atención médica provocó un movimiento creciente de padres dedicados a hacer lo mejor para sus hijos.

Mientras consideramos el estado actual de los derechos de los padres, consideremos las dos amenazas principales que enfrentan, así como el impacto legislativo sobre ellos.

 

Educación pública politizada

Cada vez más, juntas escolares en todo el país están adoptando políticas que ponen en peligro la mente, el cuerpo y las relaciones familiares de los niños. Ahora es el momento de que hablen los padres, educadores y miembros de la junta escolar interesados y preocupados.

Las controversias que surgen en la educación K-12 hoy en día sobre la Teoría Crítica de la Raza (TCR) tienen sus raíces en la teoría crítica y el posmodernismo.

La teoría crítica es una teoría social y una filosofía que ve a todos y todo a través del lente de la raza y enseña que la sociedad está fundamentalmente corrompida por dinámicas de poder basadas en la raza. Estas dinámicas de poder permiten que ciertos grupos opriman a otros grupos (basados en raza, clase, orientación sexual o identidad de género).

La única solución a la opresión, según los defensores de la TCR, es una renovación completa de la sociedad, incluyendo a nuestro gobierno, las comunidades e incluso las relaciones familiares. Para renovar estas denominadas estructuras de poder dominantes, primero se deben “desmantelar” los valores e instituciones tradicionales, como el núcleo familiar, la religión e incluso el liberalismo clásico.

Seamos claros: el racismo es malo. Toda persona es creada a imagen de Dios, merecedora de igual trato y respeto. Pero la teoría TCR no es la solución al racismo en Estados Unidos. Y no debe inyectarse en las aulas de las escuelas públicas ni enseñarse como verdad.

Los estudiantes deben aprender sobre el mal de la esclavitud basada en la raza y las leyes de Jim Crow. Pero no deberían ser adoctrinados en narraciones politizadas sobre la historia estadounidense, como la afirmación del Proyecto 1619 de que Estados Unidos es un país fundamentalmente racista en el que nuestras libertades son herramientas de opresión.

Cuando se introduce un currículo influenciado por la teoría TCR en las escuelas, se les enseña a los niños a no ver a sus compañeros de clase como potenciales amigos y compañeros de juego, sino como personas apartes y sospechosas.

Hoy en día, muchas escuelas introducen las doctrinas de la teoría crítica al promoverla como el medio para lograr la “justicia social” y la “equidad”.

En uno de los primeros casos de este tipo, ADF impugna una política del distrito escolar de Virginia basada en la teoría TCR que discrimina a los estudiantes y viola sus derechos civiles. La "Política contra el racismo" de la Junta Escolar del Condado de Albemarle se adoptó con el declarado propósito de eliminar "todas las formas de racismo". En cambio, fomenta la hostilidad racial.

El racismo no se elimina con más racismo. Como escribió una vez el presidente del Tribunal Supremo de los EE. UU., John Roberts: “La forma de detener la discriminación por motivos de raza es dejar de discriminar por motivos de raza”.

 

Políticas de identidad de género y "atención médica" oculta

Como ya se señaló, todos los seres humanos poseen una dignidad inherente y deben ser tratados con respeto. Y esto obviamente incluye a los niños que luchan por sentirse cómodos con sus cuerpos.

Igual de obvio es que, las escuelas públicas no deberían promover entre sus estudiantes, puntos de vista politizados sobre la orientación sexual y la identidad de género. Sin embargo, con la introducción de la teoría de género en el aula y las políticas de las escuelas públicas, esto está sucediendo en muchos distritos escolares de todo el país.

De hecho, las políticas que ignoran la realidad biológica amenazan la salud y seguridad de los estudiantes y socavan el derecho fundamental de los padres a dirigir la crianza y educación de sus hijos.

Contrario a lo que se les enseña a los niños en algunas escuelas públicas, nadie nace en el cuerpo equivocado. Los estudios muestran que la mayoría de los niños que experimentan confusión de género llegarán a aceptar su sexo si se les permite pasar por una pubertad normal.

En cambio, algunas escuelas públicas están socialmente "transicionando" a los estudiantes en la escuela sin notificar a los padres, manteniendo "archivos secretos" sobre estudiantes con confusión de género y obligando a los empleados de la escuela a dirigirse a los estudiantes de manera inconsistente con su sexo. Prácticas como estas no solo violan los derechos de los docentes y los obligan a mentir a los padres; sino que también perjudican a los estudiantes e ignoran claramente los derechos fundamentales de los padres.

Solo miremos lo que le sucedió a una familia en el distrito escolar de Kettle Moraineen Wisconsin.

Los funcionarios escolares dijeron que usarían un nombre y pronombres masculinos para dirigirse a la hija de 12 años sin el consentimiento de los padres, e incluso a pesar de sus objeciones. Tuvieron que sacar a su hija de la escuela para proteger su salud mental y preservar sus responsabilidades como padres.

El gobierno no es co-padre con las madres y los padres. Todos los padres tienen el derecho y el deber de elegir lo que es mejor para sus hijos, especialmente cuando se trata de atención médica y decisiones que podrían afectar el resto de sus vidas.

Defendemos el derecho de los padres a tomar decisiones por sus hijos frente a los intentos del gobierno de usurpar ese papel.

 

En las legislaturas

Los padres están asumiendo el desafío en todo el país.

Cuando el fiscal general Merrick Garland ordenó a las agencias federales de aplicación de la ley que consideraran tomar medidas para abordar las "amenazas" a las juntas escolares (esas "amenazas" aparentemente eran padres preocupados que alzaron su voz), padres que dieron un paso al frente.

Y mientras ADF representa a los padres en los desafíos legales para exigir sus derechos, igualmente importante es el esfuerzo continuo para alentar a las legislaturas estatales y federales a proteger los derechos de los padres.

Sabía usted que:

  • 39 estados no tienen estatutos que definan y protejan expresamente los derechos de los padres.
  • 47 estados no otorgan a los padres la revisión de los materiales y actividades de aprendizaje antes de la enseñanza.
  • 12 estados no permiten que los padres participen en los planes de estudios de educación sexual de sus escuelas.

El Centro de Defensa Legislativa de ADF está abogando por una legislación que asegure que el gobierno no pueda infringir los derechos fundamentales de los padres. Esto incluye legislación que afirme los derechos de los padres de dirigir la crianza de sus hijos, proporcione una mayor transparencia en el plan de estudios y garantice que los padres, no las escuelas, tomen decisiones vitales sobre la atención médica de sus hijos.

El esfuerzo por cimentar los derechos de los padres es multifacético. Es demasiado importante para no serlo.

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ADF team members contributed to the writing and publication of this article.